La escultura "Barcino", el nombre romano de Barcelona, es un poema visual de Joan Brossa. Se encuentra en la Plaza Nova de Barcelona, delante del Palau Episcopal.
La columna que tiene detrás son las dos últimas arcadas de uno de los dos acueducto romanos del siglo I que llevaban agua a la ciudad.
Estas arcadas quedaron integradas dentro de las defensas de la ciudad romana. A mediados del siglo pasado fueron reconstruidas.