23 de febrero de 2022
El Ayuntamiento alarga hasta el 31 de marzo el período para pedir la regularización de las terrazas nuevas o ampliaciones excepcionales para que los restauradores tengan más margen para realizar las solicitudes.
La continuidad estará condicionada al aval técnico del Ayuntamiento y al cumplimiento de los criterios de la ordenanza en cuanto a distancias, garantías de paso, condiciones de accesibilidad, etc.
La previsión es que en verano las terrazas en calzada que se mantengan ya dispongan del mueble homologado obligatorio, por lo que el 2022 será el año de la desaparición definitiva de los bloques de hormigón y elementos provisionales de las calles de la ciudad.
Para incentivar y facilitar el cambio en los muebles en calzada, el consistorio lanzará una línea de subvenciones a la instalación de plataformas por un valor de hasta 4 millones de euros.
El plazo para solicitar la continuidad de las terrazas excepcionales instaladas a raíz de la pandemia se ampliará un mes. Inicialmente, la modificación puntual de la Ordenanza de terrazas preveía que se pudiera solicitar hasta el 28 de febrero. Ahora, el Ayuntamiento, de acuerdo con el Gremio de Restauración de Barcelona y el sector de la restauración y también el comercial, alargará este período hasta el 31 de marzo para que los restauradores tengan más margen para presentar las solicitudes y darles facilidades a la hora de realizar el trámite. El cambio se llevará a votación en el Plenario del Consejo Municipal del próximo viernes.
En mayo de 2020, el consistorio desplegó una serie de actuaciones extraordinarias para dar respuesta a la crisis sanitaria de la COVID-19 con la instalación o ampliación de terrazas. Se trataba de apoyar la restauración, favorecer la viabilidad de los establecimientos y hacerlo de forma compatible con un espacio público más vivo y accesible y el cumplimiento de las medidas sanitarias.
Desde entonces, se han concedido 3.618 licencias para terrazas nuevas y ampliaciones excepcionales que salvaron al menos 1.875 puestos de trabajo, según un estudio de la Universidad de Barcelona. Del total de nuevos permisos, 1.483 se han dado en espacios como cordones de aparcamiento, carriles de circulación y chaflanes. Esto ha supuesto la sustitución de 2.652 plazas de aparcamiento.
Estos permisos provisionales se prorrogaron automáticamente el 1 de enero, y desde entonces y hasta el 31 de marzo los restauradores pueden pedir regularizarlos y transformarlos en una licencia ordinaria de la vía pública para la instalación de terrazas . Pueden hacerlo telemáticamente, a través del siguiente enlace: https://seuelectronica.ajuntament.barcelona.cat/oficinavirtual/ca/tramit/20210001506
La permanencia de la terraza estará siempre condicionada a que el Ayuntamiento apruebe expresamente su viabilidad técnica y al cumplimiento de los criterios marcados por la ordenanza en cuanto a accesibilidad, distancias, garantías de paso para los vecinos, etc. Se priorizará la consolidación de las terrazas en calzada de forma ordenada y evitando la dispersión y fragmentación.
Los restauradores que quieran mantener las terrazas en calzada tendrán que disponer de un mueble-plataforma accesible, homologado y seguro donde colocar las mesas y sillas. Esto permitirá sacar adelante el proceso de retirada de los elementos provisionales –bloques de hormigón y pívots amarillos– para dejar atrás la provisionalidad que marcó la pandemia. Todo ello, con el objetivo final de que en verano todas las terrazas en calzada que se consoliden ya dispongan de mueble. Y, por tanto, que en el 2022 signifique la desaparición definitiva de los bloques de hormigón de las calles de la ciudad.
Además, para incentivar y facilitar el cambio en los muebles en calzada, el Ayuntamiento lanzará una línea de subvenciones a la instalación de terrazas en calzada por un valor de hasta 4 millones de euros. Sólo podrán acogerse los titulares de terrazas y ampliaciones en calzada.
Respecto a las terrazas en acera, se estudiará caso por caso, siguiendo los criterios de la ordenanza, con el objetivo de preservar la continuidad de las terrazas, evitar la dispersión y la fragmentación, asegurar el paso y la accesibilidad y garantizar un buen encaje con el entorno. Y si no se solicita la continuidad de una terraza, se considerará que se renuncia a ella y el consistorio la retirará.
Para controlar la ocupación del espacio público y garantizar el equilibrio de usos, tal y como ya preveía el decreto de autorizaciones excepcionales por la COVID, el Ayuntamiento denegará las solicitudes de licencia en caso de reincidencia en la comisión de infracciones de carácter grave o muy grave en el plazo de seis meses anteriores a fecha de hoy, 31 de diciembre de 2021. También se podrán denegar si en un área determinada se aprecia una especial saturación de establecimientos que ponga en peligro el equilibrio entre las actividades y necesidades de la población residente. Esta circunstancia será valorada por los servicios técnicos municipales mediante informe motivado.
Un mueble-plataforma accesible y seguro
La modificación de la Ordenanza de terrazas aprobada definitivamente por el plenario el pasado diciembre busca ganar espacio en calzada para las terrazas y dar seguridad jurídica a los nuevos muebles. Pero no hace cambios en el resto del articulado, puesto que se mantienen los apartados vinculados al procedimiento de otorgamiento de licencias, el régimen sancionador y las condiciones de accesibilidad y de implantación en el espacio público, por ejemplo.
El uso de plataformas será obligatorio cuando la terraza se ubique total o parcialmente en la calzada. Los muebles tendrán que estar homologados y formar parte del Recopilación de elementos urbanos del Ayuntamiento, como los siete modelos codiseñados con empresas del sector que se adaptan a chaflán o cordón de aparcamiento. Se situarán en los espacios de calzada colindantes a la acera como cordones de aparcamiento, siempre que no afecten a un carril bici o de transporte público y que no impidan el paso de servicios, la utilización de los servicios públicos y visualización de las señales de tráfico. acceso a parkings o equipamientos. Y será necesario garantizar una distancia adecuada con los otros elementos del entorno para garantizar la accesibilidad y la seguridad.
También se regula la colocación de sombrillas –no podrá haber ningún punto de la sombrilla a menos de 20 cm del límite exterior de la plataforma–, y no se admite el uso de biombos. Tampoco se podrán colocar jardineras entre la plataforma y la acera.