4 de julio de 2022
El acuerdo del consistorio con la Asociación Profesional de Vendedores de Prensa de Barcelona y Provincia, el Colegio de Periodistas de Cataluña y la Asociación de Quioscos de la Rambla llega después de muchos meses de trabajo e incorpora una decena de propuestas hechas desde el sector para garantizar la viabilidad de los kioscos.
El acuerdo prevé mantener la venta de prensa como actividad principal pero incorpora nuevos productos hasta ahora no autorizados, como café o comida para llevar envasado, y servicios como hacer de taquilla para la distribución de última milla de paquetería, ser punto de recarga de baterías eléctricas o integrarse en la red de seguimiento del programa social Vincles.
En los próximos meses se tendrán que hacer efectivas las modificaciones que permitan a la ciudadanía encontrar la nueva oferta acordada en los quioscos de la ciudad a partir del próximo año.
Más información: https://www.youtube.com/watch?v=UbHI_S_fNqY, sesión en la que participan el teniente de alcaldía y concejal de Presidencia, Jordi Martí; Margarita Céspedes, presidenta de la Asociación Profesional de Vendedores de Prensa de Barcelona y provincia (APVPBP) y Juan Jiménez, presidente de la Asociación de Quioscos de la Rambla.
El Ayuntamiento de Barcelona, a través de la dirección de Patrimoni, ha llegado a un acuerdo con los quiosqueros y entidades del sector (la Asociación Profesional de Vendedores de Prensa de Barcelona y Provincia (APVPBP), el Colegio de Periodistas de Cataluña y la Asociación de Quioscos de la Rambla) para evolucionar el actual modelo de kiosco hacia un modelo más sostenible y viable económicamente, que incorpore en su oferta una decena de nuevos productos y servicios. Ahora, una vez definidos, ya se trabaja para hacer efectivos los cambios y adecuar la normativa a la nueva realidad.
El acuerdo llega después de muchos meses de trabajo, entrevistas a los representantes de las asociaciones y grupos empresariales, encuestas a los titulares de los quioscos para conocer de primera mano las necesidades y expectativas de las personas que regentan sus negocios y recoger sus propuestas. Asimismo ha sido necesario realizar un trabajo técnico para analizar la viabilidad de las propuestas y estudiar qué autorizaciones o modificaciones del pliego requerían.
Los quioscos de prensa vienen sufriendo desde hace años la crisis de la prensa escrita, a la que se le ha sumado las consecuencias y efectos de la pandemia o la crisis global que vivimos. Dados todos estos condicionantes, la revisión y evolución del modelo actual para adaptar los kioscos de Barcelona a las nuevas necesidades del siglo XXI es un paso importante para proteger la figura del quiosquero y mejorar las posibilidades de negocio y de ingresos a medio plazo. A su vez, sirve para empoderar a las asociaciones de vendedores de prensa, uniendo esfuerzos y maximizando la socialización de beneficios o mejoras entre asociados. Y por último, pero no menos importante, también supone una oportunidad para Barcelona para aprovechar el potencial que supone disponer de esta red de espacios de propiedad municipal repartidas por todos los barrios de la ciudad para prestar servicios de utilidad social o de interés ciudadano.
Un acuerdo para poner al día la regulación de los kioscos y adaptarlos a las nuevas necesidades ciudadanas y del sector
El nuevo modelo de quiosco consensuado con las asociaciones supone una hoja de ruta clara de los pasos que se realizarán en los próximos meses. En total, se ha acordado que los quioscos puedan ofrecer una decena de nuevos servicios o productos, atendiendo a las demandas del sector, que se organizan en dos paquetes en función del trámite que requieran.
Un primer paquete incluye las medidas y propuestas que requieren modificar el pliego de cláusulas reguladoras de la concesión del uso privativo de dominio público de los quioscos situados en la vía publica, vigente desde 2013 y con duración hasta 2030. Hasta ahora , este pliego faculta a los titulares de quioscos a vender diarios, revistas, y en general, publicaciones periódicas y libros en un 80% del espacio, con la posibilidad de destinar el 20% de la superficie de exhibición restante a la venta de otros productos, como loterías, souvenirs, regalos, tarjetas de transporte, entradas o recargas de móviles, etc.
En concreto, los cambios que se realizarán en el Pliego prevén modificar los porcentajes de venta, manteniendo un mínimo del 51% de prensa para contribuir a la viabilidad del sector de la prensa escrita. Asimismo, se incorpora la venta de nuevos productos hasta ahora no autorizados, como café o comida para llevar envasado. La concesión incorporará, asimismo, una nueva cara de publicidad en los módulos, lo que incrementará la aportación que reciben los quiosqueros de la explotación publicitaria del quiosco. Y por último se trabajará para que se integren en la red de seguimiento del programa Vincles, destinado a reforzar las relaciones sociales de las personas mayores que se sienten solas y mejorar su bienestar.
Un segundo paquete de mejoras consensuadas con las asociaciones y grupos empresariales pasa por la autorización de vender u ofrecer nuevos productos y servicios en los quioscos, que no necesita una modificación del pliego. En este sentido se ha previsto que puedan hacer de taquilla para la distribución de última milla de paquetería, tener cajeros automáticos, servir de base para instalar antenas para el despliegue de redes 5G, vender entradas de espectáculos o recargar baterías eléctricas.
En este segundo paquete, la gestión correrá a cargo de los quiosqueros, de acuerdo con el modelo acordado. La Asociación Profesional de Vendedores de Prensa de Barcelona y Provincia (APVPBP) será el encargado de realizar un Acuerdo Marco con las diferentes empresas de servicios, que contará con la validación del Ayuntamiento y que permitirá a todos los quiosqueros adherirse y ofrecer en su establecimiento este nuevo producto o servicio.
En cuanto al calendario de implantación de los cambios consensuados, se prevé que en un plazo de tres meses se puedan hacer efectivos los que requerirán autorizaciones y acuerdos entre las partes y un horizonte de seis meses para realizar las modificaciones del pliego administrativo.
Actualmente, de los 322 quioscos que existen en la ciudad, hay 259 adjudicados y 10 más cedidos al Instituto Municipal de Personas con Discapacidad (IMPD), por su explotación vía una cooperativa. Actualmente hay 53 quioscos vacantes de los que se ha previsto su retirada de 31 antes de que acabe el mandato.