22 de junio de 2021
El volumen, que ya se puede leer desde este enlace, es una crónica de la Barcelona comercial del 2020, un recuerdo de la estrecha relación de la ciudad con su comercio, y sobre todo, un reconocimiento y un homenaje a los y las comerciantes de la ciudad en el que se recogen testimonios de las diferentes tipologías de comercio, desde el comercio esencial, a los establecimientos de los mercados, el comercio no esencial o la restauración.
Los textos del libro han ido a cargo del escritor Rafael Prades, autor de la trilogía gastronómica "sabrosos bocados", y las fotografías son de Paola de Grenet, Edu Bayer, Isaac Planella, Laura Guerrero, Martí Petit, Jordi Molet, Ronni Kurtz, Ansar Naib, Marc Lozano, Vicente Zambrano González Pepe Navarro, Florian Hofmann; Rhiannon Elliott, Tatiana Zhukova y Vicente Zambrano González.
Durante el acto de presentación, que se puede recuperar en vídeo aquí, el primer teniente de alcaldía, Jaume Collboni, ha remarcado que "los últimos meses han sido el mejor ejemplo de cómo la solidaridad, la tenacidad y la resiliencia pueden actuar como palanca de cambio, y los comerciantes y restauradores son un ejemplo y un modelo en el que la ciudad se refleja. Es el modelo de los mercados municipales, en todo momento abiertos para garantizar el suministro de productos básicos a la ciudadanía; el del pequeño comercio, que ha adaptado sus servicios a las nuevas necesidades de vecinos y vecinas; el de bares y restaurantes, esencia de una manera de ser, abierta y mediterránea, que han hecho suyas todas y cada una de las medidas aprobadas para preservar la salud cuando ésta se ha convertido en prioritaria."
También durante la presentación de la publicación, Rafael Prades, autor del libro, explicó que "Barcelona no se puede explicar sin su comercio ni su restauración", y ha asegurado que "la publicación es relevante porque tener memoria permite avanzar". Asimismo, Gabriel Jené, presidente de Barcelona Abierta, ha recordado que "todo el mundo trabaja intensamente para recuperar la actividad y el dinamismo característico de Barcelona". Por su parte, Pròsper Puig, vicepresidente de la Fundación Barcelona Comercio, ha recordado la importancia durante toda la pandemia del asociacionismo comercial y de los gremios, que se encargaron de acompañar a los pequeños y medianos comerciantes de la ciudad. Por último, Montserrat Ballarín, concejala de Comercio, Mercados, Consumo, Régimen Interior y Hacienda, ha apuntado que "hay que aprovechar herramientas como la digitalización para salir reforzados de un escenario que esperamos no tener que volver a vivir nunca más".
Barcelona, una ciudad de comercio
Barcelona cuenta, según el censo de comercio de 2019, con más de 61.000 establecimientos comerciales. Desde el mismo inicio del confinamiento raíz la pandemia, en marzo de 2020, el comercio esencial ha garantizado el abastecimiento de todos y el funcionamiento de la vida cotidiana en los momentos más duros del confinamiento. Por su parte, el comercio no esencial, así como la restauración, ha expresado su tenaz voluntad de mantener su actividad, con la complicidad del vecindario, y superar la crisis. En ambos casos, y por razones diferentes, ha sido un año difícil que el libro "Comercio de Barcelona. Siempre cerca" quiere recordar y plasmar en un volumen que recoja estas vivencias y constituya un recordatorio para el futuro.
Así, el volumen se ha organizado en cuatro grandes apartados: la llegada inesperada de la Covidien-19 y las primeras actuaciones para hacerles frente; la especial relación de la ciudad con un sector comercial que es parte fundamental de su identidad desde hace siglos; la situación especialmente difícil por la que ha pasado el centro de la ciudad en un año sin visitantes y como está ayudando a repensar este espacio; y los nuevos retos y oportunidades que la creciente digitalización de la sociedad suponen para el comercio y la restauración.
